IBM y la Universidad, una relación basada en la creación de valor mutuo.

IBM tiene una larguísima trayectoria de colaboración mutua con el mundo universitario, que se remonta a los años cuarenta del S.XX. En 1945 una colaboración entre la compañía y la Universidad de Columbia en EE.UU. fue el germen de la división de investigación de IBM –IBM Research-, el pilar fundamental de una empresa que hoy en día destina a I+D+i 6.000 millones de dólares anuales y lidera el ranking de registro de patentes a nivel mundial.

Como consecuencia de aquellas primeras colaboraciones con la universidad, IBM decidió crear la función de Relaciones con Universidades. Desde entonces, la colaboración de IBM con las universidades se ha ampliado a prácticamente todos los ámbitos del mundo universitario, desde la investigación conjunta, el apoyo a la docencia, transferencia de conocimiento y tecnología, responsabilidad social o emprendeduría, entre otros.

Desde sus orígenes la relación IBM-Universidad ha sido muy fructífera y ha revertido en la sociedad en forma de progreso tecnológico. Investigaciones que han dado lugar a innovaciones tan importantes para el progreso tecnológico como el Microscopio de Efecto Túnel, que permitió por primera vez visualizar superficies a nivel atómico y por el cual los investigadores de IBM Gerd Binning y Heinrich Rohrer obtuvieron el premio Nobel de Física, contaron con la colaboración del mundo universitario.

Es difícil desligar el liderazgo tecnológico de IBM del mundo universitario, como también es difícil desvincular el progreso tecnológico de nuestra sociedad de las innovaciones y la transferencia de conocimiento realizada por IBM a través de diferentes iniciativas, una de ellas la colaboración con las universidades.

Desde un punto de vista teórico, la función de Relaciones con la Universidad se define fácilmente: “construir relaciones con el sistema universitario basadas en creación de valor para las partes implicadas”.

En concreto se fomentan particularmente las relaciones con el mundo universitario en función de diferentes objetivos, como pueden ser divulgar y compartir el conocimiento tecnológico de IBM y ayudar a que profesores y estudiantes accedan a sus tecnologías, colaborar en proyectos de I+D+i, identificar el mejor talento universitario, apoyar la generación de ideas y emprendimiento empresarial en el ámbito universitario, etc. El peso de uno u otro objetivo varía en función de la relación concreta con cada universidad o institución académica.

Entrando en más detalle sobre cada uno de estos objetivos mencionados anteriormente,  IBM pone el conocimiento de sus miles de profesionales a disposición de las instituciones académicas de todo el mundo. Localmente en países como España lo hace fomentando la participación de sus profesionales en foros universitarios, seminarios, “workshops”, etc. Por otra parte y a nivel internacional, IBM pone a disposición del mundo universitario (profesores y estudiantes) de forma gratuita y para uso docente prácticamente todo el catálogo de software de la compañía así como determinado material de cursos y acceso a cierta capacidad de proceso, siendo todo esto canalizado a través del programa Academic Initiative (http://www-03.ibm.com/ibm/university/academic/pub/page/academic_initiative). Esta exitosa iniciativa global que nació en 2004 ha hecho que miles de estudiantes y académicos -los primeros siempre a través de un profesor que actúa como tutor- accedan al mercado de trabajo con conocimiento de algunas de las más innovadoras herramientas de Tecnologías de la Información. En diez años de existencia de este programa más de 3 millones de estudiantes, a través de más de 25.000 profesores pertenecientes a más de 5.000 instituciones académicas se han beneficiado de poder acceder a todo este conocimiento.

Respecto a la colaboración en proyectos de investigación, IBM lleva tiempo impulsando un tipo de investigación centrada en la idea de que “el mundo es nuestro laboratorio”. Es decir, que la investigación no se produce únicamente acotada a los laboratorios de I+D+i, sino que en cualquier lugar donde exista un problema, IBM puede impulsar un proyecto de investigación, bien trabajando conjuntamente con un cliente bien con una universidad u otra institución. Este enfoque se refuerza además desde la función de Relaciones con Universidades, que trata de fomentar estas colaboraciones y explorar de forma sistemática posibles áreas de investigación de interés común.

Otro de los objetivos destacados anteriormente es identificar el mejor talento tecnológico. Para ello, el departamento de Recursos Humanos de IBM trabaja en colaboración con la Universidad en la identificación del mejor talento que sale de las instituciones académicas y, siempre en función de las necesidades de negocio, se ofrece a los jóvenes graduados mejor cualificados oportunidades laborales.

Además, IBM apoya todo el ecosistema de generación de ideas y creación de empresas que tienen las propias universidades y las distintas industrias a las que sirven como proveedores de conocimiento. En ese sentido se fomenta la ayuda a estas empresas de nueva creación (emprendedores) a través de ayudas concretas en su primeros pasos en las áreas tecnológicas.

¿Cómo se materializa todo este esfuerzo de colaboración? Por un lado, a través del departamento de Relaciones con Universidades, que cuenta con un grupo de profesionales dedicados exclusivamente a esta tarea, pero, por otro, a través del área de Responsabilidad Social Corporativa, que fomenta las actividades de voluntariado entre los empleados, entre ellas la académica, siendo una actividad con muy buena acogida entre los empleados de IBM.

Aunque la función de Relaciones con Universidades no tiene una responsabilidad comercial directa, sí es responsable de colaborar con las unidades comerciales de IBM desde la perspectiva de proveer a las universidades e instituciones académicas las mejores soluciones tecnológicas adaptadas a sus necesidades.

IBM en España, como en todos los países, adapta esta estrategia corporativa a las necesidades y características de las instituciones académicas españolas. Nuestra colaboración con universidades españolas se plasma en distintas actividades, cobrando mucho protagonismo las áreas docente e investigadora.

Por ejemplo, la colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid para la construcción del sistema de supercomputación Magerit, que en su día fue el ordenador más potente de España y que está basado en la tecnología POWER 7 de IBM. Su potencia de cálculo se utiliza para proyectos de todo tipo, desde ciencia básica hasta simulaciones financieras. Otra colaboración reseñable es con la Universidad de Cantabria para el desarrollo del superordenador Altamira, que está abordando proyectos que requieren procesar gran volumen de datos, en áreas cómo física de altas energías, astrofísica, medio ambiente, dinámica de fluidos, ingeniería genética, materia condensada y óptica, entre otros.

Más reciente y fuera del ámbito de la supercomputación destaca  la colaboración con la Universidad Rey Juan Carlos gracias a la cual y con la participación de otras empresas como Eulen y Meliá se ha creado el grado en Ingeniería de Servicios en esta universidad. Esta colaboración es consecuencia directa de la necesidad de nuevos perfiles profesionales que la industria está reclamando, en este caso, los futuros ingenieros de servicios.

Soledad Liniers Armiñan

Directora de Relaciones con Universidades

IBM España

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